"El pez por la boca muere", y ahora le costó el empleo''
Jeffrey Jones tuvo que renunciar a la Sagarpa por decir que los campesinos deben seguir el ejemplo de los narcotraficantes.
Jeffrey Max Jones Jones * El Heraldo de Chihuahua * 31 de octubre de 2009
Chihuahua, Chihuahua.-
"Hay dos requisitos para ser político: Uno es el sentido de honor y el otro un sentido del humor", afirmó durante su campaña a senador, Jeffrey Max Jones Jones,
a quien sus declaraciones le valieron antes la simpatía del votante, pero ahora le costaron su trabajo como subsecretario de Fomento a los Agronegocios en la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
Identificado por su agudeza para inventar chistes y bromear con cualquier pretexto, Jones hubo de renunciar anteayer a su puesto por expresar que los campesinos deberían seguir el ejemplo de los narcotraficantes, producir lo que demanda el mercado y usar la tecnología.
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"Hay muchas cosas que el sector puede aprender del narcotráfico... y si hay alguien que sabe de mercado, son ellos", expuso el oriundo de Nuevo Casas Grandes, durante su participación en un foro titulado Enfoque de la Política Agroalimentaria en un Escenario de Crisis Económica Global."Desafortunadamente están apostando a un cultivo nocivo, pero ésa es la lógica que tenemos que aprender: Definir el mercado y luego orientar el aparato productivo, la logística para poder surtir estos mercados", agregó en dicho evento, antes de presentar su renuncia.
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Entre los chihuahuenses se recuerda la originalidad de quien se proclamó a sí mismo, en sus tarjetas de presentación como,
inventor, mercenario, cazador profesional, abigeo, agente doble, bailador, guitarrista, jinete de toros, caballero, extremista analítico del cerebro derecho, cantante de serenatas, aviador y jugador. Asimismo, como alguien que conduce viajes espaciales, deroga impuestos, maneja guerras, destruye puentes, inicia revoluciones, doma tigres, administra gobiernos, desaloja bares, sofoca insurrecciones, ejecuta venganzas, arregla carreras de caballo, e inclusive, un individuo que "castra dinosaurios".
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Asimismo se le recuerda como un candidato fuera de serie, que al momento de registrarse para ser candidato al Senado de la República arribó a la sede de la dirigencia estatal de Acción Nacional, montando un caballo.
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Entre sus logros políticos destaca el haber sido el primer diputado federal electo en un distrito rural de Chihuahua, considerados hasta su triunfo como hegemónicamente priístas. Causó revuelo además al nombrar a Clara Torres y a Angélica Talamás, coordinadoras de su campaña, con el sobrenombre de "Las chicas dinamita", reconociendo así su importancia para las victorias conseguidas por Acción Nacional es esta entidad, gracias a la labor de las mujeres blanquiazules.
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"Parece una idea descabellada, pero todas las buenas ideas de la historia parecieron al principio ideas descabelladas", expresaría luego al presentar su proyecto para el problema de la falta de agua en Chihuahua, mismo que consistía en traer el líquido desde Canadá, a través del río Bravo. Así las tres naciones se verían beneficiadas. Asimismo, durante su campaña aseveraría que oraría para que lloviese en Chihuahua.
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Tal espontaneidad fue reconocida por diversos panistas chihuahuenses, quienes comentaron que seguramente la intención de Jones jamás fue hacer una apología del delito de narcotráfico.
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De destacar que Jones ocupó los cargos de diputado federal y senador de la República. Es miembro de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, estudió en la Universidad Brigham Young, en Utah, Estados Unidos.
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Su último trabajo en el sector público fue precisamente el de subsecretario de Fomento a los Agronegocios, a raíz de su amplia experiencia como empresario dentro del sector rural.
COMMENT
ResponderEliminarDefinitivamente cero en conducta - Este es el ejemplo de un talento mal aprovechado - Su sitio no es en el gobierno o la politica, sino en Televisa - Esperamos verlo pronto en ''La Hora Pico'', ''Los Comediantes'', ''Cero en Conducta'', o ''La Casa de la Risa''.
Si no tuvieramos tantos programas humoristicos, los mexicanos nos la pasariamos llorando sexenio tras sexenio.